La Semana Calasancia se vivió con una profunda alegría, creatividad y un profundo espíritu de unidad. Cada jornada estuvo marcada por el compromiso, la responsabilidad y la entrega de nuestros estudiantes y de sus familias, quienes, con entusiasmo y dedicación, hicieron posible una celebración verdaderamente memorable.
Como comunidad educativa, expresamos nuestro sincero agradecimiento por el apoyo brindado para que esta semana se convierta en una experiencia significativa e inolvidable para todos.
La programación estuvo inspirada en el legado de San José de Calasanz, recordándonos la importancia de educar desde la piedad y las letras, con un amor ordenado que guía, acompaña y transforma. En cada actividad se hizo evidente el espíritu calasancio: la cercanía con los estudiantes, la pedagogía basada en el afecto, la formación del corazón y la promoción de una educación inclusiva, especialmente atenta a quienes más lo necesitan. Estas convicciones se reflejaron en las propuestas pedagógicas, culturales, deportivas, espirituales y de emprendimiento que dieron vida a la semana.
Nuestros estudiantes demostraron no solo habilidades académicas y artísticas, sino también liderazgo, creatividad, trabajo colaborativo y un profundo sentido de identidad calasancia, valores que fortalecen día a día nuestra misión educativa.
La Semana Calasancia 2025 nos deja aprendizajes, testimonios y momentos que fortalecen nuestro compromiso educativo, renovando el llamado de Calasanz a formar personas íntegras, solidarias y espiritualmente sensibles. Con esta experiencia, reafirmamos la importancia de caminar juntos por el bienestar y la formación integral de nuestros niños, niñas y adolescentes.
¡Que viva San José de Calasanz!